Aprendí a buscarte, nada más, sin saber que estabas, tan adentro mío y más allá... de todo y de nada. Aprendí a llorarte y sin saber, que en cada mañana bajabas el sol para traer... luces de esperanza. Qué extraño fue todo, ya lo ves... la vida que pasa, y en la masa austera, desnudez... sobran las palabras. Sobran las palabras... Que argumento gris tiene el perfil, de las horas lacias, deslozando lágrimas de 'actriz', de estériles páginas. Anda suelto el aire en el pinar... borrando nostalgias...